Si al endurecimiento de sanciones añadimos unas vías de comunicación cada vez mejores y mas seguras y coches cuyos equipos de seguridad, tanto activa como pasiva, son cada vez mas avanzados, el objetivo de victimas de accidente de tráfico 0 parece posible conseguirlo.
No obstante, si no hay una concienciación de los conductores, tener buenas carreteras y coches cada vez mas seguros nos sirve de nada. El coche mas avanzado en materia de seguridad en la mejor carretera del mundo es capaz de sufrir un accidente con víctimas mortales si no existe concienciación de una conducción segura del conductor.
La concienciación del conductor en asunto de seguridad vial se debe resumir en la frase: “mas vale perder un minuto en la vida que la vida en un minuto”. Desgraciadamente existen hoy muchas familias destrozadas de por vida a causa de los accidentes de tráfico. Ni las ayudas económicas ni sociales son capaz de paliar las consecuencias que puede llegar a provocar un accidente.
La tarea de concienciar al conductor es en el fondo una cuestión personal y propia del individuo. Aunque desde organismos o instituciones se colabore con esta tarea de concienciación con cursos, anuncios, etc. detrás del volante solo se pone una persona y su cabeza.
No arriesgar en la carretera para ganar 5 minutos puede darnos, literalmente, la vida.