UN AÑO MAS O UN AÑO MENOS

Cuando llega la hora de pasar en el calendario el mes de Diciembre también es el momento de sumar un año mas en nuestras vidas. Pero los años son únicamente una forma de medir el tiempo, nada va a cambiar en la naturaleza del 31 de Diciembre al 1 de Enero, y en nosotros, como parte de la naturaleza, lo mas lógico y normal es que no se produzca un gran cambio de un día a otro.

Pero aunque después de comer las 12 uvas sigamos siendo los mismos, 365 días dan para mucho. Sobre todo para muchos cambios en nosotros. Podemos aprovechar el espacio de tiempo de un año atrás para pensar y hacer balance de los cambios que se han producido. Y creo que este es un buen periodo, ya que el cambio de año se produce en el ámbito de un tiempo como en Navidad, marcado por ser una época amable, por la desconexión de la rutina, por la compañía de familia y amigos y por ser un tiempo un tanto melancólico.

Apreciar claramente los cambios que se producen en nosotros y en nuestro entorno no parece una tarea clara y fácil. Una buena forma de pensar y ver estos cambios es a partir de cosas concretas. Acordarnos de algo, y pensar en como estaba o era hace un año y como esta o es ahora es un método por el cuál podemos observar los cambios producidos en algún aspecto de nuestra vida.

Repitiendo este método por diversos aspectos de nuestra vida y apreciando los cambios o evolución en ellos durante un año podemos llegar a hacer un balance de todos los cambios que se han ido produciendo en nosotros durante 12 meses. A partir de este balance veremos también como han evolucionado algunos aspectos que nos rodean.

Una vez que hayamos podido advertir todos estos cambios nos daremos cuenta de una cosa bastante importante: cosas que antes nos preocupaban ahora no nos preocupan, y viceversa, han aparecido en nosotros nuevas preocupaciones. Con la comparativa de estas dos cosas podremos decidir si nos hemos equivocado o no en el camino recorrido durante el año. Si observamos que hemos caído en errores tenemos la posibilidad de el año que viene, a la hora de hacer nuestro balance personal ver estos posibles errores o fallos corregidos.

¿PREMIO MERECIDO?

Hace unos días supe la noticia de que el mes pasado se celebró la Gala del Deporte de Castilla-La Mancha en edad escolar, acto de gran importancia para la región y el deporte, sobre todo por la presencia en la misma de miembros como el presidente de Castilla- La Mancha o el director general de deportes de la región.

Pero cuál es mi sorpresa cuando entre los premiados veo al I.E.S. Fernando de Mena de Socuéllamos, centro en el cuál cursé estudios secundarios y bachillerato. Pero mi sorpresa fue aún mayor cuando veo que el premio que recibe el instituto es al Juego Limpio por su participación en los Juegos de la Juventud. Y bajo mi humilde opinión creo que este centro, mi centro, no es el mejor ejemplo de juego limpio a la hora de participar en estos juegos de la juventud.

Esta opinión la vierto aquí sabiendo muy bien lo que digo, ya que el poco juego limpio de algunos miembros de este centro, (alumnos y profesores), es algo que me afectó a mí y algunos compañeros directamente. La historia es algo enrevesada pero trataré de resumirla.

Estos Juegos de la Juventud constan de dos fases, primero una clasificatoria y luego una final. En esta competición, pensada para promocionar el juego limpio entre los jóvenes, la pueden jugar alumnos de 1º y 2º de Bachillerato. En el año 2008 el I.E.S. Fernando de Mena participa en estos juegos y decide participar con los alumnos de 1º de Bach. entre los cuales estaba yo.

Participamos en la primera fase clasificatoria y conseguimos los puntos suficientes para estar en la fase final. Esto no fue fácil porque hubo que competir con otros centros que habían decidido participar con alumnos de 2º de Bachillerato. Meses después llegó el momento de participar en la fase final, y aquí es donde parece que el juego limpio del Fernando de Mena empieza a acabarse. El profesor encargado ese año de configurar las listas para los Juegos decide darle ese trabajo a un alumno de su confianza, diciéndole al mismo que tiene total libertad de elaborar listas, contando incluso con gente de 2º de Bachillerato que no había participado en la fase previa, con el único objetivo de intentar ganar la competición.

Debido a esta decisión, otros compañeros y yo que habíamos participado y clasificado en la primera fase nos vimos fuera de jugar la fase final sin otra escusa que el instituto iba a ganar tal fase. Si esto es JUEGO LIMPIO que alguien me lo explique. Pues bien, el centro fue a jugar ( o ganar) la última fase de los Juegos de la Juventud y el resultado creo que no fue el esperado, ya que no consiguieron ni siquiera acercarse al objetivo.

Ante este hecho, bajo mi opinión injusto, que sufrimos mis compañeros y yo casi nadie nos apoyó, ni siquiera nuestros compañeros con los que habíamos jugado la primera fase de los Juegos. La única persona que se interesó por este hecho fue una profesora que intentó ayudarnos y denunciar el hecho pero parece ser que a casi todo el mundo lo único que le importaba era una victoria, de la única forma que fuera.

Aunque los alumnos que han conseguido este premio al juego limpio no tengan nada que ver con esto, creo que es importante que se sepa o se recuerde lo que pasó en este centro y lo que consintieron algunas personas de este centro, ya que el premio se le otorga a el centro y no a una generación de alumnos ni a profesores.

Pues bien, como ex-alumno del I.E.S. Fernando de Mena me alegro que se le otorguen premios, pero no me siento orgulloso de que se otorgue una mención de este tipo cuando en el centro han ocurrido hechos todo lo contrarios a lo que se le reconoce en tal premio.

Con esta crítica no estoy criticando a los profesores del departamento de Educación Física, a los cuáles he conocido bien y son unos excelentes profesores y mejores educadores, lo que quiero es hacerles pensar a algunas personas si el premio o mención otorgada al I.E.S. Fernando de Mena se la merece el centro plenamente o será que a la Junta de Comunidades de Castilla- La Mancha le gusta dar premios mas por el nombre que por merecimiento.